Quizá sea urgente no juzgar ciertas demoras según tus relojes

… quizá sea urgente no juzgar ciertas demoras según tus relojes… quizá sea necesario no juzgar ciertas distancias según tus medidas… quizá no acabas de leer más allá de lo que parece inmediato y, en realidad, no lo es… la gratuidad todo lo dispone «suavemente»… deja, pues, este tiempo que te agobia y pasa a ese «otro», que no es según las mensuras a las que estas acostumbrado, sino que se descubre, paso a paso, en el abandono y en la confianza… ¡cuánto te falta de confianza!… sin ella no logras salir del laberinto cotidiano que parece ahogarte… sí, es verdad, hay una vida más profunda… sí, es verdad, aún puedes confiar, entregándote sin reparo, aunque te cueste y lo hagas mal… ¿qué más da?… la cuestión es llegar, aunque tropieces o andes un tanto cojo… pero, directo… «sin medios» y «sin por-qué»… descubre el verdadero latido de tu vida… podrán dibujarse innumerables «muecas», pero la vida, esa vida, la verdadera, late en verdad… la #rosasinporqué vive alegremente en el fondo del corazón, nada le impide disfrutar gratuitamente de la vida… ¿te reconoces un viviente a pesar de tus muchas muertes?, ¿te animas a confiar a pesar de tus innumerables errores y caídas?… (con el Evangelio de hoy, San Lucas 29,27-40)…