A pesar de lo que escuches, a pesar de lo que veas, a pesar de lo que sientas

… a pesar de lo que escuches, a pesar de lo que veas, a pesar de lo que sientas… hay una vida que ignoras, que quizá olvidas o soslayas… es la vida verdadera que corre más alta, por encima de los sentidos o más hondo que todas las noticias, que toda la información que te satura y agobia… ¡vida verdadera, inimaginable!… no aciertas a expresar bien tu bien, y quedas atado a un carro que te arrastra y te miente, porque supones demasiado o pretendes razonar tanto que todo lo pierdes en la vorágine de inquietudes y de angustias… acepta lo que no logras circunscribir ni encerrar en ninguna parte, acepta que lo mejor esté por encima de ti, pero profundamente en ti… acepta que la gratuidad te regale, aunque por el momento no puedas descubrirlo para «usarlo»… es que no se trata de «usar», tampoco de «aprovechar»… tampoco de ganar o de perder y, mucho menos, de comparar… de nada te apoderes, deja que el agua se deslice mansamente… la #rosasinporqué es profundamente feliz porque vive en la buena noticia de que todo es gracia… ¿vives saturado de noticias, de información, sin poder respirar el aire puro de la gratuidad?, ¿te regalas un momento de silencio y de quietud para disfrutar la vida y los tuyos?… (con el Evangelio de hoy, San Lucas 7,31-35)…