Las sorpresas te muestran que puedes hallar el “tesoro escondido de la gratuidad”

… las sorpresas te muestran que puedes hallar el “tesoro escondido de la gratuidad” en el lugar más improbable que puedas imaginar: ¡en ti mismo!… la gratuidad está en todas las cosas, ¡pero no todo es gratuidad!… y por eso mismo es importante que aprendas a buscarla, encontrarla y reconocerla… tendrás que sortear peligros y engaños, aprender a tomar decisiones y descubrir modos de ir avanzando, cada vez más hacia lo hondo… y allí, en lo hondo, encontrarte con el Don de Dios por excelencia, ¡si conocieras el don de Dios!… es que Dios es un Dios perturbador que siempre sorprende… la tentación que todos experimentamos, en toda religión y en toda espiritualidad, consiste en “domesticar” a Dios… crear un dios que te favorece a ti, a tu grupo, a tu país, a tu Comunidad… y que derrota a tus “enemigos”… pero Dios es un Dios que siente compasión por toda la creación y cuyo espíritu vivo está en todo, y que no se deja “encorsetar” por nadie ni por nada… es un Dios que destruye en ti todos tus cómodos prejuicios y todas tus falsas seguridades, religiosas y seculares… esto resulta muy doloroso, muy perturbador, pero es la oportunidad del renacimiento… de una vida nueva cuando “descubres el tesoro o encuentras la perla” y lo das “todo” para quedarte con ellos… la #rosasinporqué descubrió el “tesoro escondido” y encontró la “perla más fina” en la gratuidad, por eso su vida es nueva, fresca y alegre, cada mañana… ¿encontraste el “tesoro” y la “perla” que justifican darlo todo?, ¿te quejas o reniegas por lo que has dejado?… (con el Evangelio de hoy, San Mateo 13,44-46)…