Es de noche, pero será más noche dentro de un rato

… es de noche, pero será más noche dentro de un rato… noche de la noche, traición, el amigo no era tan amigo… traición, desgarro del corazón, no desilusión… dolor, más que dolor, traición… se entrega al amigo, se lo vende, se lo deja… peor, se lo abandona, traición… no importa lo vivido, lo compartido, importan las monedas que suenan en bolsas agujereadas… no importa quien sea, bueno o malo, inocente o culpable, Dios u hombre, importo yo, nadie más que yo… yo, y mis intereses, y mis planes, y mis gustos, yo y yo… no me interesa que me mire, que multiplique gestos de amor para llamarme la atención… noche de la noche, traición… y, ¿después?… huir, huir de todos, huir del día, huir de la vida, huir de los recuerdos como si quemaran, huir de los abrazos, huir… huir lejos, más allá de mares de remordimiento, travesías en el desierto, cuevas de tesoros, caminos de oro, puentes de plata, castillos de aire, torres de marfil, pantanos del pensamiento… es de noche, ¿querré que amanezca algún día?… la #rosasinporqué acompaña a quienes desesperan y huyen, y los invita a la aurora de la gratuidad… ¿has experimentado la traición?, ¿deseas salir de tus noches?… (con el Evangelio de hoy, San Juan 13,21-33.36-38)…