El camino de la Cuaresma implica “purificación”

… el camino de la Cuaresma implica “purificación”… haz de “desprenderte” de aquellos hábitos que impiden tu plenitud, haz de cortar ligazones o apegos que no te dejan realmente “ser”… estás llamado a una plenitud, tu meta, tu destino, es una plenitud… pero, casi siempre, permaneces en la «negación» de esto o de aquello… y te quedas atascado de la peor manera, en exceso celoso por no sé qué perfecciones que sospechas alcanzar a fuerza de seguir rechazando… sin embargo basta que dispongas tu «jardín interior» para que el Señor lo ocupe sin más… ¡esa es tu plenitud… ya que Aquél que nace en tu corazón es insospechable y tú no te conformas con ninguna migaja, ni con ningún otro pedazo o fragmento… cada vez, cuando abres las puertas de tu morada, viene el Señor con mayor intimidad, secreto y silencio… la causa del amor de Dios es Dios mismo y su modo es “amar sin modo”… avanzas hacia la perfección del amor, eres perfectible… entonces, ¡déjate perdonar y perdona!, ¡déjate amar y ama!… dedícate a abrazar tu permanente imperfección y la de tus hermanos… la #rosasinporqué aspira a la plenitud de la gratuidad, por eso todos los días vuelve a empezar… ¿qué perfección es la que deseas alcanzar?, ¿es tu vida amar más demás?… (con el Evangelio de hoy, San Mateo 5,43-48)…