Cuando creas que sólo tú importas y tu tiempo es de oro, oye las dos moneditas

… cuando creas que sólo tú importas y tu tiempo es de oro, oye las dos moneditas, que sin darse importancia, valoran al otro… cuando creas que solo lo hiciste y tuyo es el logro, oye las dos moneditas del que por ti las puso antes y así lo hizo todo… cuando creas que tus bienes te vuelven de más poderoso, oye las dos moneditas del que todo lo puede y te hizo del polvo… cuando creas que es justo que aplaudan lo que has hecho hace poco, oye las dos moneditas taparse una a otra, el rubor de sus ojos… cuando creas que solo hay una forma y es hacerlo a tu modo, oye las dos moneditas, que solitas caen, pero suenan a coro… cuando creas que nadie te escucha y te dejan muy solo, oye las dos moneditas que afinan su oído, para oír si cae otro… cuando creas que la cruz es castigo y lo llevas al hombro, oye las dos moneditas del que en la cruz Él se puso y pagó ya por todos… cuando creas que Dios te ha olvidado en medio de los lobo, oye las dos moneditas de tu buen Pastor, que entregando su vida, ha impedido tu robo… cuando creas que tu vida no vale y seguir vivo es de locos, oye las dos moneditas del Padre que empeñó a su Hijo y te entregó a ti su bono… la #rosasinporqué vale tanto porque nada se guarda, se da totalmente toda y gratuitamente… ¿das de lo que sobra por eso reclamas siempre?, ¿ere capaz de darlo todo en cada momento?… (con el Evangelio de hoy, San Lucas 21,1-4)…