Amigo y amiga de la rosa

… amigo y amiga de la rosa, surge la tentación de hacer de tu vida de fe una especie de vergel, de tranquilo paraíso donde evadirte de un mundo corrupto y caduco que se empeña en vivir “a su manera”… pero la fe no te ha sido regalada por Dios como una “burbuja de paz”… tu fe no es un sedante para las molestias sociales, ni un barbitúrico para perpetuar privilegios… la fe no provoca alucinaciones sino compromisos… estas llamado a pertenecer a la historia de Aquel que fue anunciado como “signo de contradicción”, y que vino a traer el fuego y la espada, es decir portador de la Luz y portavoz de la Verdad en un mundo que con demasiada frecuencia pacta con la oscuridad y la mentira… tu fe no es una aventura para fugarte del mundo, sino una urgencia para transformarlo según el proyecto de Dios, en el Nombre del Señor… andar por la tierra no te impide sino que te invita a contemplar el Cielo y a desearlo, anticipándolo hora tras hora, día tras día… ¡ah!, ¡qué invitación, qué vocación ésta de “más allá”!… ¡magnífico desafío que precisa de magnanimidad y constancia!… la “rosa sin porqué” vive con sus raíces en la tierra, pero abre constantemente sus pétalos hacia el cielo… ¿vives evadiendo responsabilidades y poniendo a Dios como pantalla?, ¿eres cociente de la contingencia, de la precariedad, de todas las cosas y te desesperas por ello?… (con el Evangelio de hoy, San Lucas 21,5-19)…