Que tus palabras coincidan con los latidos más hondos de tu corazón

… que tus palabras coincidan con los latidos más hondos de tu corazón… que tus miradas reflejen la limpia música de tu amor… que tus pasos coincidan con tus sueños más profundos… amigo y amiga de la rosa, ¡desea profundamente ésta coherencia conductual en tu vida!… tantas veces velas el sendero y no aciertas a distinguir las huellas ni las flores que lo señalan… ésta coherencia no necesita auspicios, se vive en el silencio, es decir, lejos de todo aquello de lo que no se puede dar razón, de todo aquello que sobrepasa tus consideraciones «publicitarias» y tu furia por darlo a conocer… incomparable valor el de esas cosas profundas que no son manifiestas y que ni se compran ni se venden… ¡es el secreto de tu corazón fielmente enamorado!… ¿quién se atreve a hablar de ello?… tantas veces percibes sonidos, noticias, voces que debieran callar… ¡tantas veces percibes el horror de la mentira y de los engaños!… tú no te desanimes, no cedas a la tentación de los cínicos que mienten sin parar y engañan todo el día… ¡no te avergüences jamás de tu fidelidad enamorada!… la #rosasinporqué permanece fielmente hermosa a pesar de las tormentas… ¿está tu corazón lejos de los que amas y entonces tus palabras suenan hueras?, ¿te das cuenta del valor de la fidelidad para afirmar que realmente amas?… (con el Evangelio de hoy, san Marcos 7,1-13)…