Siempre de camino, algunas espinas pueden herirte, pero nunca detener tu andar

… siempre de camino, algunas espinas pueden herirte, pero nunca detener tu andar… piensas, tantas veces, si has quedado bien o has quedado mal… vana e inútil cuestión, planteo inservible y curiosidad no extraña a aquella de la mujer de Lot… no te quedes plantado en preguntas sin respuestas, confía… cuantas veces sea necesario respeta el secreto, ese secreto de tu corazón agradecido que todo lo aprovecha para bien… ¡tan cerca está la felicidad!, es esto algo que no puedes imaginar… entonces no has de perder tiempo en consideraciones que te lleven a desviarte hacia los lados… la gratuidad te llama aquí y ahora, no mañana, ni en un tiempo hipotético que no existe… ¡te llama ya!, y ya mismo te otorga su alegría y su confianza… sin intervenciones fabulosas ni mediaciones caprichosas… no hay instante más propicio que éste… no postergues tu bien, ¡tu bien es ahora!… es en este momento presente, con todo el regalo de quien ha robado tu corazón, de quien nace cuando te mira y lo miras… la #rosasinporqué sabe que las distracciones son muchas y variadas, las ilusiones también, pero ella no detiene su andar agradecido… ¿vives el ahora como lo mejor que te puede pasar?, ¿lo aprovechas sin distracciones dándote todo entero sin vueltas y sin vueltos?… (con el Evangelio de hoy, San Lucas 9,1-6)…