¿Quieres quedarte anclado en un instante?

… ¿quieres quedarte anclado en un instante?, ¿no aspiras a ir llenando tu vida de relatos, encuentros, pasiones, gestos, lecciones, ideas y sentimientos?… en este mundo nuestro de juventudes eternas, no está de más que recuerdes que la vida no es algo estático ni un momento congelado… que cada día es único, y en ellos vas escribiendo, esculpiendo o pintado, una historia irrepetible y recorriendo un camino para el que no hay marcha atrás… vivir y creer es crecer, siempre, hasta el último día… la vida no se gasta, sino que se construye… el tiempo que pasa no es tiempo que descuentas, sino una historia que vas creando.… no eres un bebé ni un crío ni un adolescente… pero, ¿hacia dónde te encaminas?, ¿qué quieres ser con las cosas que haces?… ¿quieres ser grande siendo un grandote y un agrandado o quieres ser grande como un niño?… crecer es hacerte niño, no grandote ni agrandado… ponte en las manos de la gratuidad, abandónate en ella… que ella te consuele en tus heridas, que te anime en tus cansancios, que te envíe a los heridos y cansados para que seas su ungüento y su fuerza en medio del mundo agradado y deformado… déjate abrazar, déjate amar… la #rosasinporqué se ha vuelto como una niña pequeña, vive agradecida en su necesidad de los otros en su vida… ¿en qué cosas has cambiado últimamente?, ¿estás conforme con quien eres o con quien quieres llegar a ser?… (con el Evangelio de hoy, San Marcos 9,30-37)…