¿Qué grietas necesita el sol para filtrarse?

… ¿qué grietas necesita el sol para filtrarse?, ¿qué noches debo todavía pasar aguardando las mañanas que se van?, ¿qué heridas y llagas me visitarán hasta que se me conceda la salud del cuerpo y del alma?, ¿qué ventanas y puertas debo abrir para no dejar que la vida pase así nomás?… ¿será éste que llaman Jesús, el sol y la mañana, la salud, la puerta y la ventana?… encerrado estoy en temores, defensas, costumbres y modos de pensar… dicen que este Maestro no se detiene ante esas “armaduras oxidadas”, dicen que busca las grietas, las noches, las heridas y las llagas, las puertas y las ventanas cerradas… “Nicodemo, en la vida nueva que Yo te ofrezco, las puertas no tienen llaves, ni las ventanas trancas, no existen las noches, las grietas son provechosas y las heridas y llagas no sangran… no se habla del amor, pero se ama con los ojos, las manos y las entrañas… las lágrimas son fértiles, la tristeza ha huido para no regresar… el nacimiento a esta vida que te ofrezco viene de lo Alto… es la Sangre derramada de Quien se da sin límite, es la paciencia infinita de quien espera en la noche, es la pasión desmedida de un Dios embarrado que perfuma enamorando”… la #rosasinporqué no reniega de las espinas de su tallo y, todas las mañanas, se dona y ofrece gratuita y hermosa… ¿aprovechas tus noches y tus grietas?, ¿buscas la vida nueva o te has contentado con esta antigua que pasa?… (con el Evangelio de hoy, San Juan 3,1-8)…