Las crisis no piden permiso

… las crisis no piden permiso y menos aún las que causan los necios… hallándote en medio de la prueba te preguntas por esa «liberación» ¡que tarda tanto!… el rostro del malicioso reaparece en un diminuto horizonte, cuya amenaza en realidad nada puede, pero ahí está… sabes que las «pruebas» abren puertas nuevas y acaban por deshacer amenazas y pretensiones… ¡adelante, pues, a pesar de todo!, pero sin abandonar la lucha… es preciso combatir al infame que se escuda en su propia ridiculez… aguardabas grandes cosas, esto o aquello, pero la verdad es que nunca llegan… ahora, sin embargo se dibuja una oportunidad… y es ésta de la intimidad y de la gratuidad… pero no aguardes ni imagines compensaciones, ni felicitaciones, ni aplausos… prepárate para la prueba que no admite excepciones… la hora presente sabe a «pena», a angustia, en un mundo donde la falsedad ha fijado su apresurado domicilio… por tanto la verdadera vida comportará la desilusión, que esto no te asombre… la #rosasinporqué está preparada para la prueba, la gratuidad no la exime de combatir por lo que quiere… ¿estás preparado para las pruebas o te quejas cuando aparecen las dificultades?, ¿evitas decir la verdad para no tener problemas?… (con el Evangelio de hoy, San Lucas 11,47-54)…