La torpeza carece de anuncios

… la torpeza carece de anuncios… lo que un día juzgabas imposible, es hoy actualidad… de donde se sigue que lo imposible es «posible» también en un cierto orden o desorden de cosas… parece que la ignorancia y la necedad se adueñan de todo abriendo el paso no sólo a lo «imposible» sino a aquello que daña a los propios y extraños… no es que cueste entender, no se quiere entender lo que contradiga lo establecido… sin embrago, reconocer y sumergirte en el corazón es mayor que todas las «obras» que puedas realizar en esta vida… ¡quien pueda y quiera entender, que entienda!… presta atención a lo que ya llevas, desde hace tanto tiempo… ¿el signo?… aquello… todo lo que no cabe en signo alguno… quisieras ver más de lo que has visto, quisieras ver más de lo que ves, oír lo que no se oye por esas rutas sin confines… pero todo eso que deseas no se halla donde sospechas… sólo la «gratuidad» te lo entrega en lo escondido del corazón… déjate sembrar, ¡no impidas la siembra de la gratuidad!… la #rosasinporqué se deja sembrar cada día todos los días la gratuidad, por eso entiende el darse toda hermosa a todos… ¿siembras semillas de gratuidad en el corazón de los tuyos?, ¿te preocupas por entender con el corazón o eres de los que tienen ojos y no ves, oídos y no escuchas?… (con el Evangelio de hoy, San Lucas 8,4-15)…