… la novedad produce vértigo… ¡y, sí!, la aventura de la creatividad te abre a caminos insospechados, te revela rostros que antes eran extraños, te moldea una mirada nueva y oxigenada… ¡no tengas miedo!… cuando tu mirada queda preñada de mañana, no puedes menos que imaginar nuevas expansiones del hoy, dejando volar la imaginación… ¿por qué no cierras los ojos y te silencias, atiendes a lo profundo y así te embriagas de amaneceres?… mímate y respira con suavidad y con conciencia de tu presente… cuando abres espacios a la creatividad, tus alas se despliegan con una fuerza insospechada, el vuelo se hace liviano y apuestas a nuevas realidades que te coloreen de más bondad y belleza… la novedad surge como el paso natural de lo germinal, pero lleva tiempo… no aplaces la tarea de examinarte en las elecciones del día a día y ver qué te está restando creatividad … ¡cuánta monotonía se puede camuflar en las puertas cerradas de las casas o en los corazones amarrados de seguridades y miradas esquivas!… anda, ¡gánale a tu pereza y a tu mediocridad!… ¡atrévete a la audacia de amar siempre más y mejor!… la #rosasinporqué está llamada a hacer de lo imposible un posible palpitante en el tiempo presente por medio de la gratuidad… ¿te dejas ganar por la monotonía y no soportas ninguna novedad que cambie tus planes?, ¿reconoces que el vino nuevo necesita odres nuevos, que una vida nueva por la conversión necesita un corazón nuevo?… (con el Evangelio de hoy, San Mateo 9,14-17)…