Júzgame, Padre, con amor compasivo

… júzgame, Padre, con amor compasivo para que yo deje de juzgar a mis hermanos… júzgame en el amor que te hizo buscarme cuando ciego me perdía, y en la Cruz de tu Hijo hallarme, como hijo en cada herida… júzgame en el amor de tu Madre que en la Cruz escucharía, que el que entregaba a su Hijo, le diría, Madre mía… júzgame en el amor de mis padres que fecundos se atrevían a traerme hijo al mundo, y apostar por la otra vida… júzgame en el amor de mis hermanos que tu cuidado compartían: Dios es de todos “Padre”, y sobre todo “nuestro”, me decían… júzgame en el amor de tus pobres, que me dieron de lo que no tenían; hoy que los tienes Contigo, dales lo que no pudiste darle en vida… júzgame en el amor de tus enfermos que en su cruz, despacito me decían: ese cielo que yo espero es de dicha compartida… júzgame en el amor de tus niños, que sus regalos me traían, ya que de Ti bien aprendieron, que Aquél que ama, así lo hacía… la “rosa sin porqué” no juzga porque ama sin medida… ¿cuás es la medida con la que juzgas a tus hermanos, la de la mera justicia o la del amor compasivo?, ¿reconoces la viga que hay en tus ojos o solo ves la paja en el ojo ajeno?… (con el Evangelio de hoy, San Mateo 7,1-5)…