¿Qué hacer frente a la injusticia reiterada de tantos tiranuelos, cuando la angustia te oprime…

… ¿qué hacer frente a la injusticia reiterada de tantos tiranuelos, cuando la angustia te oprime, cuando te ves asediado y abofeteado por ese poder manipulador, que todo lo ocupa y lo invade, que ya no te trata como a verdadera persona?… ¿qué hacer cuando pierdes la paz, cuando ni siquiera respetan tus dolencias y te arrojan en medio de la nada?… lo único que hay es esto: lo que ahora vives… ¿entonces?… ¡confianza!, aquiétate y confía, siéntate en la gratuidad… date tiempo, no respondas rápido, si es posible duerme un minuto… haz, presto, un espacio, ese barullo que te asalta y te niega ese mínimo espacio, es lo de menos… hay más, ¡siempre hay más!… a pesar de ese vacío de angustia, de pesar, de pena, de desengaño, de dolor, ¡quédate!… si es necesario arrójate sobre el suelo, déjate caer… cuando tengas conciencia más serena de encontrarte ahí abajo, mira abriendo apenas los ojos, no dejes que nada te invada demasiado a través de ellos, pero entreábrelos… si eres consciente de tu silencio, de tu nada, de tu caída, descubrirás al Señor aún más bajo, muy por debajo de ti… Él te dirá: “te estaba aguardando… desde hace mucho tiempo estoy aquí”… la #rosasinporqué sabe que más hondo hay caminos de gratuidad que no existen allá arriba en el plano de la mezquindad establecida… ¿en qué nivel te mueves y respiras, en la gratuidad que siempre ve más o en la mezquindad que siempre ve menos?, ¿con tus decisiones escandalizas a tus hermanos o les llevas tranquilidad?… (con el Evangelio de hoy, San Mateo 17,22-27)…