Canta el poeta en el centro de su alma

… canta el poeta en el centro de su alma… no sabe cómo manifestar su melodía ni cómo escribir lo que se escapa… huyen los modos, se detienen las palabras, no hay manera de decir, apenas una sonrisa o una lágrima escondida en lo más hondo… y, sin embargo, resuena en los espacios sin fronteras, un himno que es incomparable y que no parece necesitar otra cosa que su inspiración secreta… es semejante a la oración silenciosa que supera la propia expresión… no pretende textos ni conceptos… ha surgido y nacido más allá… y más allá permanece, continúa en nuevas armonías, saltando entre las montañas, sumergiéndose en el mar, ascendiendo a los cielos y besando las estrellas… amigo y amiga de la rosa, no desesperes en los silencios ni en los desiertos… las flores brotan en cualquier parte… aunque los «otros» te apresuren, tú reposa y deja… en el centro todo es misterio y vida nueva, no dejes que se acalle tu corazón cuando tu alma canta… la #rosasinporqué canta alegre y agradecida de gratitud cada mañana… ¿puedes cantar agradecido tu vida?, ¿reconoces la bondad que te mira y le da sentido a tu vida?… (con el Evangelio de hoy, San Lucas 1,46-55)…