Amigo y amiga de rosa, hay una fuente en tu corazón

… amigo y amiga de rosa, hay una fuente en tu corazón … es la gratuidad que te dispone a un amor sin medida y a un perdón ilimitado… no te asusten ni temas tus limitaciones, ni tu fragilidad o debilidad… no te acobarden los condicionamientos de afuera, ni la cultura del desinterés indiferente… lo que importa es el tamaño de tu corazón, es decir la sinceridad de tus deseos, la grandeza de tus sueños… ¿por qué?, ¿no sabes que todo depende de las dimensiones de tu corazón?… si te animas a descender por aquellos caminos que trazas y que sólo conoce el que se atreve por ellos, entonces quedarás admirado, aunque falte esa dura comprobación que por aquí y por allá pretendes… la fuente del corazón y de la vida es abundante y desbordante, recurre a ella sin dudar… no te espante el fracaso y la contrariedad… si perdonas, puedes levantar más la altura de tu vuelo… ¿no te imaginabas semejante cosa?… siempre puedes ir más alto, siempre puedes cavar más hondo… el perdón otorgado no es vano, nunca es vano… no perdonas porque quien te ofendió se arrepintió y te pidió disculpas… perdonas y le ofreces la oportunidad de arrepentirse y, tal vez, de pedirte disculpas… la #rosasinporqué ofrece cada día la fragancia del perdón que brota de la gratuidad que la embellece… ¿te cansas de perdonar y no reconoces que tienes el corazón pequeño o encogido?, ¿dilatas tu corazón para amar más y, entonces, perdonar más?… (con el Evangelio de hoy, San Mateo 18,21-35)…