Allí donde crees perder, es allí mismo donde tú ganas

… allí donde crees perder, es allí mismo donde tú ganas… deja que todo, sí todo, pase a las manos de la gratuidad… la mezquindad estropea todo porque pretende esas «realizaciones» que no lo son… aprende, de nuevo, a dejar, ¡sólo la gratuidad es realidad!… deja que ella venga, deja libre la puerta de tu casa… ¡deja que te transforme lo que eliges, no lo que dejas!… ¿dejas que el bien y la belleza te abracen?… ya no puedes dejar que otra cosa tehabite o que tú mismo te alejes del corazón de tu paz… hoy despiertas en un amanecer hermoso, en un silencio nuevo de una aurora incomparable… ayer perdías tiempo y espacio en horas tempranas pretendiendo eso que no llega ni razón tiene… querías vender no sé qué productos y pasar por titiritero renombrado entre tus vecinos… hoy ya no sabes sino repetir tus viejos lances, con la ilusión de aumentar ese poder «que no puede»… deja los engaños que abruman y acaban por hacer sufrir más… no vuelvas sobre tus pasos, crees tenerlo todo y, si tienes, no tienes nada… la #rosasinporqué se transforma cada día en gozo y paz al elegir la gratuidad, y no se deprime por lo que deja… ¿te transforma lo que eliges o lo que dejas?, ¿eres libre o esclavo en las cosas que tienes?… (con el Evangelio de hoy, San Lucas 14,25-33)…