Te sorprende una «noticia» que, de suyo, porta un mensaje inconcebible

… te sorprende una «noticia» que, de suyo, porta un mensaje inconcebible… desaparece del horizonte la tenue luz que seguías ayer… los instantes que te envuelven, al menos así parece, traen un nuevo desconcierto… es entonces cuando, azorado, quedas enmudecido, sin lograr la respuesta que aguardabas… todo te abruma, y vacilas aquí y allí sin saber cuál es el camino más adecuado… el hombre desconcertado sólo halla opciones diminutas, sólo percibe la desolación de lo vulgar, sólo puede atender a lo más inmediato, carente de perspectivas… ¿es posible seguir tal camino, así descaminado?, ¿un camino que no conduce a ninguna parte?, ¿no hallarás en la «nada» el acierto que te falta?… no hallaras «respuestas» en los «santos de almanaque» ni en “canciones a la moda”… nada que suene mucho, nada que te cierre la interioridad, será una repuesta… busca la verdad de la gratuidad en tu vida, vuelve al silencio, al asombro, a la sonrisa, a la paz… la #rosasinporqué no vive desconcertada, la gratuidad le muestra el camino para no andar dando vueltas… ¿qué haces cuándo algo te desconcierta y nos sabes qué hacer?, ¿vives habitualmente desconcertado por insuficiencia de principios que orienten tu vida?… (con el Evangelio de hoy, San Lucas 9,7-9)…