… la gratuidad aparta y deja en olvido, allá en medio de zanjas y ciénagas, el ruido de tentaciones y engaños… la fuerza de la atención iluminada abre horizontes siempre nuevos, aún cuando el asalto del mal pretenda vencer… los ruidos de por ahí o por allá no hacen otra cosa que cosquillas, ¡tú los aguardas y por ello se vuelven potentes!… cuando no aguardas ni atiendes otra cosa que lo que eres o ya tienes o acontece en tu corazón, el singular ataque no logra su objetivo… educar es crear hábitos y tu puedes crear hábitos de gratuidad, extraños en los corazones mediocres… diariamente te puedes dejar encandilar por resplandores engañosos, de esos que pasan y pasan y nada más… la tentación es otorgar poder excesivo a preocupaciones que no tienen fundamento… no son los caprichos los que perduran, la Verdad, aunque demore, acaba venciendo siempre… la #rosasinporqué no teme a las tentaciones, sabe que existen, pero no se deja envolver por la mezquindad ni engañar por la ingratitud… ¿cómo enfrentas las tentaciones?, ¿aprovechas las tentaciones para purificar y fortalecer tu opciones fundamentales?… (con el Evangelio de hoy, San Lucas 4,1-13)…