… ¡sueña, amigo y amiga de la rosa, sueña!… que se despierten tus sueños, ¡sueña, sueña!… ¿hace mucho tiempo que no sueñas?… festejar los nacimientos, celebrar los cumpleaños, es animarte a soñar, es atreverte a pasar un momento feliz esperando un mañana mejor, es arriesgarte a confiar en la esperanza… ¡sueña, amigo y amiga de la rosa, sueña!… mira que María, la niña con el mundo en el alma, sutil, discreta, oyente, capaz de correr riesgos, es el comienzo de los grandes sueños de Dios en la historia… Ella, pequeñita de la espera, toda Ensoñación de Otro, afronta la batalla y vence al miedo… Ella, señora del Magníficat, canta la grandeza velada en lo pequeño… y muy pronto, Madre, Sueño cumplido del sueño del Salvador… Ella, hogar de las primeras enseñanzas, discípula del Hijo hecho Maestro… Ella, valiente en la tormenta, con Él crucificada abriéndote al Misterio… Ella, refugio de los pobres que muestran, indefensos, su desconsuelo cuando duele la vida, cuando falta el sustento… Ella aún hoy te sigue hablando, atravesando el tiempo mostrándote la senda que torna cada “hágase” en un nuevo comienzo, animándote a soñar… la #rosasinporqué no deja de soñar y celebra la vida como una hermosa fiesta de la gratuidad… ¿celebras el día de tu nacimiento y el de los tuyos como el inicio de un sueño de Dios?, ¿necesitas de regalos para festejar impropiamente los cumpleaños?… (con el Evangelio de hoy, San Mateo ,1-16.18-23)…