¿De qué están hechas las lágrimas que pesan tanto?

… ¿de qué están hechas las lágrimas que pesan tanto?… ¿cómo andar sin agua cuando hay tanta sed?… si las palabras no alcanzan, aún queda el lenguaje de las «lágrimas», que brotan, corren y caen en silencio… pero en un silencio que es siempre nuevo… llora sí, tu soledad… ahora mismo se inclina el silencio para cubrir con su manto el dolor de tu vida… la Palabra se ha hecho «sufrimiento», y éste sabe de particular fecundidad… no existen las «respuestas suficientes» al dolor… estas confundido cuando buscas soluciones en «extensión», en pura línea horizontal… no encontrarás respuestas en el camino de la «cantidad»… «eso» que te agobia y fatiga, “eso” te oprime en un pequeñísimo lugar… error es otorgarle una influencia de la que carece… posees un talento especial cuando el dolor te visita… una fecundidad inédita se abre en tu corazón si no dejas de amar… deja, pues, que tu corazón sonría, a pesar de las lágrimas húmedas que caen de tus ojos… huye de las lágrimas secas del corazón de piedra… “Señor, ¿por qué resulta tan difícil a los hombres ser amados?… ¿será que el amor lleva hacia los cuatro costados, y en Cruz así nos pone: brazos abiertos, pies bien clavados, los ojos al cielo, y en la llaga, miles de hermanos?…”… la “rosa sin porqué” posee el talento de la sonrisa en medio de las espinas… ¿vives como fuentes las pruebas, como oportunidades los problemas?, ¿son tus lágrimas húmedas y fecundas por el amor que encierran?… (con el Evangelio de hoy, San Mateo 25,14-30)…