Desorientado, tal vez, en la confusión de hoy y de la historia de siempre

… desorientado, tal vez, en la confusión de hoy y de la historia de siempre, vuelves a la pregunta sin respuesta… ¿y ahora, qué?… la claridad de una respuesta no depende de las «certezas» del momento, ni de la lógica habitual… la respuesta y la vida toda está en el origen, en la raíz, en la misma aurora encendida más allá de todo lenguaje… ¡en la gratuidad!… quisieras ajustar lo que no se ajusta, quisieras lograr la síntesis que despejara tantas dudas y expulsara toda vacilación… pero caminas a oscuras… la luz interior nunca se apaga, es verdad, pero es escondida, silenciosa, recatada, pudorosa… vuele, entonces, a empezar, sin protestas ni reclamos… más adentro está la respuesta… ten siempre presente que lo mejor está por dónde no aparece… la #rosasinporqué supera toda confusión y toda distracción porque sólo está atenta a la gratuidad… ¿te distraes y te confundes con tanta facilidad porque no prestas atención advertida a la gratuidad?, ¿temes ir más adentro?… (con el Evangelio de hoy, San Lucas 21,34-36)…