Es normal que surjan límites donde no suponías

… es normal que surjan límites donde no suponías… y es muy posible, también, que esas fronteras aparezcan porque tu temor o tu indecisión las diseñan… la “parálisis” y la “asfixia” provocadas por estructuras o problemas han de ser superadas siempre con valor y con la convicción de que permanentemente, a cada instante, eres llamado y elevado por un regalo inimaginable de Dios… ¡la gracia libre de todo condicionamiento!… en suma, por Él y por sólo Él, por el Único, estarás por encima de todo límite… deja, pues, esas “suposiciones” que te ligan a máquinas y a mecanismos, de la especie que sean… ¡eres algo más que tuercas o tornillos y vales más que los martillos y los clavos!… ¡adelante, pues, con confianza, en el vuelo de la gratuidad!… con la oración directa, silenciosa y profunda, hallaras sin mediaciones caprichosas, la Presencia que transfigura… la #rosasinporqué todos los días escucha “talitá kum” y, agradecida, se pone a caminar y a volar… ¿te consideras limitado al descubrir tus condicionamientos?, ¿puedes caminar y volar más allá de tu baldosa?… (con el Evangelio de hoy, San Marcos 5,21-43)…