Aprender a mirar con los ojos del corazón

… aprender a mirar con los ojos del corazón convertido y descubrir el misterio de cada existencia y que toda vida es valiosa… aprender a mirar adentro, superando las apariencias, valorar el interior sin darle mucha importancia a la cáscara… aprender a otear el horizonte, superando los alambrados y tranqueras… para aprender a mirar, debo detenerme y tener tiempo para mirar al otro a los ojos y descubrir, así, su corazón… porque hay miradas gratuitas que nutren y miradas hambrientas que devoran… porque hay miradas soleadas que desentumecen, y hay miradas invernales que hielan… porque hay miradas hondas como pozos, y hay miradas ligeras como chubascos… ¡tengo que aprender a mirar!… porque una mirada amiga puede saltar un abismo, y una mirada odiosa puede levantar un muro… porque una mirada misericordiosa se dará como limosna sin decir nada, y una mirada inmisericorde juzgará y no se dará quejándose de todo… ¡aprender a mirar sinceramente y sin sospecha a los ojos!… ya que en el espejo de unos ojos pueden hallarse los perdidos, y en el espejismo de unos ojos pueden perderse los seguros… la #rosasinporqué aprendió a mirar desde la gratuidad el adentro, y purifica su mirada dándose sin medida… ¿miras el adentro o el afuera de las cosas y de las personas?, ¿utilizas el colirio de la caridad para mejorar tu mirada?… (con el Evangelio de hoy, San Lucas 11,37-41)…