Aparece, inevitable

Aparece, inevitable, la pegajosa melancolía, que adherida queda en los ayeres atardecidos, cuando el corazón olvida la gratuidad recibida en tantos amaneceres. Melancolía que llama a la nostalgia corrosiva, instando una ácida tristeza con la murmuración como mueca: queja, lamento, reproche, protesta, preguntas infinitas y obsesivas que no les interesa las respuestas. “Ojalá el Señor… More Aparece, inevitable