Todas esas maravillas que aprecias

… todas esas maravillas que aprecias, que gozas apenas unos pocos instantes, esa alegría que te invade y te deja a mitad de camino… todo, todo eso es fragmento, son piezas, sí, sólo piezas, reflejos de lo que viene, de lo que ya está llegando, del Cielo que ya ha comenzado, ¡no lo dudes!… hay quienes quieren “matar la esperanza”, pero tú no permitas que la nostalgia te ahogue porque no has podido retener esos segundos, esas horas o esos días… son sólo un pregusto, apenas una señal de algo mucho, mucho ¡tanto y tanto más grande!… en vez de entristecerte mete todo ello en tu corazón, ¡porque para ello te ha sido dado!… sin tristezas, pues, porque ya lo tienes todo… ¿no ves hasta qué punto el Señor te ama?… ¿sabes?, en cierto sentido nada pasa… el supuesto «pasado» por la gratuidad se torna «porvenir» en modo maravilloso… la #rosasinporqué crece en la esperanza al ver la entrega fecunda, aunque silenciosa, de la gratuidad… ¿reconoces las maravillas que obró el Señor para estar contigo, amarte y salvarte?, ¿cómo cuidas y haces crecer la esperanza en tu vida y alrededor tuyo?… (con el Evangelio de hoy, San Mateo 21,33-46) …