Te sorprende esa «noticia» que te trae un mensaje inesperado

… te sorprende esa «noticia» que te trae un mensaje inesperado… de pronto desaparece del horizonte la tenue luz que seguías ayer y los instantes que te envuelven traen un nuevo desconcierto… azorado, quedas enmudecido, sin lograr entender nada… vacilas aquí y allí, sin saber cuál es el camino más adecuado… “desconcertado” sólo hallas opciones diminutas, sólo percibes la desolación de lo vulgar, sólo puedes atender a lo más inmediato, carente de perspectivas… y te preguntas: “¿es posible seguir tal camino, así descaminado?”, “¿un camino que no conduce a ninguna parte?”, “¿hallaré, tal vez, en la «nada» el acierto que me falta?”… no hallarás «respuestas» mirando televisión, chateando o navegando por internet, tampoco en los «santos de almanaque»… escucha en tu corazón a Quien te ama y cuida: “vine a traer la Buena Noticia a los pobres, a anunciar la liberación a los cautivos y la vista a los ciegos, a dar la libertad a los oprimidos y proclamar un año de gracia del Señor”… escúchalo y confía… la #rosasinporqué no vive desconcertada, la gratuidad le permite sobrellevar las malas noticias… ¿dejas que la Buena Noticia prime en tu corazón?, ¿qué haces cuando te encuentras desconcertado?… (con el Evangelio de hoy, San Lucas 4,14-22ª)…