Tal vez te gustaría tener una vida “a la carta”

 

… tal vez te gustaría tener una vida “a la carta”… o, si estás por ser papá o mamá, te gustaría un “catálogo” para elegir al “hijo”… si lo primero, no te valoras como persona, sino más bien como un “bien de uso y de consumo”… si lo segundo, no deseas en verdad ser papá o mamá, engendrar un “hijo”, sino más bien “tener y usar algo”… algunos piensan “si te lo puedes permitir, paga por aquello que no consigues por otros medios”… esa lógica tal vez valdría para un coche, un celular, o una casa, pero no sobre la vida humana… es una visión egoísta de la paternidad / maternidad, que, lejos de percibir a los hijos como una bendición y un don, y quizás la mayor responsabilidad que cabe en la vida, los percibe como un derecho y un objeto de consumo afectivo… no se quiere “cargar” con un hijo enfermo, sino “disfrutar” de un hijo sano… el “yo decido” nunca es absoluto, porque el “yo” es de un ser relativo que vive con y de otros… la vida no puede ser un enorme supermercado donde tan pronto compras productos, como experiencias, emociones o historias… la vida no puede ser un gran laboratorio donde juegas a ser dios, ni puede ser el gran bazar a la carta dónde se eligen o desechan hijos… la #rosasinporqué ve y afronta la vida como una bendición y un don, la gratuidad le impide la mezquindad que selecciona y discrimina… ¿qué es la vida para ti?, ¿dejas que Dios sea tu Padre?… (con el Evangelio de hoy, San Juan 16,23b-28)…