¿Si el “amor murió” para que buscar lo que ya no existe?

… ¿si el “amor murió” para que buscar lo que ya no existe?… a veces pareciera que el “amor murió”… pero algo te mueve a seguir de camino, aunque las huellas no aparezcan… ver en la noche, caminar en la noche… el agradecido ha aprendido a ver en la noche oscura, porque ha descendido al corazón, al corazón profundo que es toda luz… se trata de un fuego encendido desde lo alto, este fuego ha penetrado hasta encender todo el leño y convertirlo… la noche es noche, pero «más amable que la alborada», decía San Juan de la Cruz… pero noche verdadera al fin, cuya hondura no tiene límites… déjate quitar el corazón de piedra, déjate cambiar esa dura piedra por un corazón de carne… no vuelvas al pasado, ya el Señor ha pasado por tu vida y te invita a más… ¡es el Señor!, no es un fantasma… ¡Él vive!… sal de tu barca, ¡anímate a arrojarte con la locura del amor que siempre confía y espera!… ¡Él vive y te quiere vivo!… la #rosasinporqué no vuelve al pasado, la gratuidad la lanza hacia adelante con el arrojo de los enamorados… ¿vuelves al pasado pensando encontrar allí los amores que has perdido?, ¿mantienes el arrojo y la frescura de los enamorados o tu corazón se ha avejentado?… (con el Evangelio de hoy, San Juan 21,1-14)…