Sé tú mismo sólo o con los otros

… sé tú mismo sólo o con los otros… egoísta o altruista, cerrado o abierto, enroscado mirándote el ombligo o erguido mirando el cielo… ama siempre, perdona siempre, da siempre, bendice siempre… ama a tus enemigos, haz bien el bien y presta sin esperar nada en cambio… para ser tú mismo sólo, tienes el orgullo… para ser tú mismo con los otros, tienes la humildad… la humildad y el orgullo construyen su vida de manera diferente… el orgullo establece falsas relaciones con Dios, negando su pecado o no acogiendo el perdón que lo rehace… falsas relaciones consigo mismo, devaluándose o estableciéndose en el resentimiento… falsas relaciones con los demás, con actitudes de sumisión, de exclusión o de rapiña para intentar realizar su propia existencia desde la autosuficiencia destructora… la humildad que asume sus heridas también puede asumir las de los demás, estableciendo relaciones sanadoras incluso con los orgullosos… su alegría no viene de mirarse en el espejo de la perfección que cuelga en su cuarto privado o aparece en las plazas de la estima pública, sino de sentirse mirada por la Misericordia y dejarse fluir libre y alegre en los propios límites al aire… para ser misericordioso como tu Padre, sé humilde… la #rosasinporqué aprende desde la gratuidad con humildad a ser misericordiosa, por eso no deja de acompañar cada amanecer… ¿qué debes trabajar en tu vida para ser misericordioso?, ¿está dentro de tus propósitos concretos ser misericordioso?… (con el Evangelio de hoy, San Lucas 6,27-36)…