… Santiago, beberás el cáliz, compartirás mi suerte… lo mismo todos aquellos que me sigan y se queden Conmigo… les propongo beber el cáliz, perder la vida liberando la existencia, cultivar amistades sanando esperanzas perdidas… tendrán que desaparecer disfrutando en otros el estreno de lo Mío por caminos inéditos… les propongo beber el cáliz, perder la vida derramando los días sin etiqueta de sinagoga o de partido, sobre buenos y malos, como la lluvia y el sol que regala mi Padre… no quieran contabilizar si sus esfuerzos han resbalado estériles sobre la piel cerrada hasta el polvo del camino, o si han calado fértiles hasta el secreto donde germina la vida… les propongo beber el cáliz, perder la vida como el que apuesta el jornal de su cansancio o la fortuna heredada… mis amigos, los que están Conmigo, los que me siguen en la entrega de sus días, en la apuesta audaz, nacen de vidas tan perdidas a sí mismas que mi Padre las esconde en su Misterio como en papel de regalo, para abrirlas entre el Pueblo el Día de la Fiesta sin ocaso… la #rosasinporqué bebe el cáliz de la entrega y contagia la vida nueva desde la gratuidad… ¿entregas o guardas tu vida?, ¿contabilizas tu entrega?… (con el Evangelio de hoy, San Mateo 20,20-28)…