… resistir comporta vencer… fuerte es quien resiste en la adversidad… y suele ser más valiente quien resiste con paciencia en retaguardia que quien ataca con adrenalina en la vanguardia… educar a los niños con el ejemplo en la paciencia y en la ternura es hacerlos fuertes ante los imprevistos de la vida… el adulto que se saca, grita, insulta y altera, demuestra lo débil que es y que necesita recurrir a la violencia para intentar controlar su descontrol… es necesario y deseable permanecer con valor respetando las propias convicciones… así aprenderás, poco a poco, el valor de la constancia y la necesidad vital de la firmeza… y recuerda que la firmeza no es dureza… la fuerza del hombre está en permanecer y en su fidelidad… en estos tiempos las traiciones y las mentiras de los mediocres parecen cubrir un oscuro horizonte, cerrado a la esperanza… la fuerza y el honor de tu vida han de manifestarse en la rectitud y en la constancia… “suaviter in modo, fortiter in re”… siempre con suavidad, pero con firmeza… la #rosasinporqué es firme en sus raíces, los vientos no alteran la gratuidad que la hermosea… ¿eres firme o duro en tus convicciones?, ¿das valor a la perseverancia y a la constancia?… (con el Evangelio de hoy, San Lucas 21,10-19)…