Quiero ser un sencillo servidor de la vida

… quiero ser un sencillo servidor de la vida, un pastor que vele por los tuyos, Señor… quiero ser puerta para que entren los sin vida y sin familia, árbol que dé sombra al cansado, fuente donde beba el sediento, canción que inunde los silencios, libro que descubra horizontes remotos, poema que deshiele un corazón frío, papel donde se pueda escribir una historia… quiero ser sonrisa en los espacios tristes, semilla que prende en el terreno yermo, carta de amor para el solitario, grito fuerte para el sordo… pastor, árbol o fuente, canción, libro o poema, papel, puerta, risa, grito, carta o semilla… lo que Tú quieras, lo que Tú pidas, lo que Tú sueñes, Señor… ¡eso quiero ser!… que mi oído esté atento a tus susurros y a los gemidos de mis hermanos… que te encuentre, y te reconozca y te siga… que mi vida se atraviese con tu amor, que mis manos estén abiertas, que mi corazón tiemble con cada hombre y mujer que padece, con cada niño y joven que se encuentre solo, que sepa hablar de familia y ser familia… que mi vida te sirva a Ti para algo, que sea un servidor convencido de la vida y un testigo encendido de la esperanza, que no de nada por perdido y no deje a nadie excluido… todo esto deseo, todo esto te pido, todo esto, Señor, te ofrezco… la #rosasinporqué quiere ser una servidora de la vida, por eso vive en y desde la gratuidad… ¿eres pastor o asalariado?, ¿quiénes pasan por ti encuentran la vida y al Señor?… (con el Evangelio de hoy, San Juan, 10,1-10)…