No es una opinión

… no es una opinión, un parecer, una impresión… es una confesión, una declaración, un testimonio… no nace de la sangre ni de la carne, de mi experiencia ni de mi ciencia, sino que es una revelación de lo Alto sobre ese encuentro fascinante y transformante de aquel día junto a la barca y a las redes… “¡Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo!!… Jesús de Nazaret, Palabra sin fin en tu nombre pequeño, Caricia infinita en tu mano de carpintero, Perdón del Padre en calles de barro, todopoderoso Señor en sandalias sin tierras, Culmen de la historia creciendo día a día, Hermano sin fronteras en una reducida geografía, Maestro de vida y amor en la comunión de la familia… no eres una mayúscula que no cabe en la boca de los más pequeños, sino Pan hecho migajas para todos los sencillos… Tú eres el agua de la vida, una Fuente inagotable en la mochila raída del que busca su mañana, un Lago azul en el hueco insomne de la almohada, y un Mar tan inmenso que sólo cabe dentro de un corazón sin puertas ni ventanas… en Ti todo está dicho, aunque sólo sorbo a sorbo vamos libando tu Misterio”… no es una opinión dicha al pasar, es una confesión que involucra toda la existencia… “tú eres, Pedro, sobre esta piedrita frágil, profundamente humana, edificaré mi Iglesia”… la #rosasinporqué se deja revelar su identidad profunda de gratuidad, y su identidad es su vocación y su misión… ¿cuál es tu identidad?, ¿qué misión tienes en la vida y en la Iglesia?… (con el Evangelio de hoy, San Mateo 16,13-20)…