Eres biología, sí

… eres biología, sí… sin embargo, el ser humano no se comporta ni entiende a sí mismo simplemente como un “animal”… el varón y la mujer son mucho más que biología… la capacidad de amar hasta el extremo y de comprometerse por el camino es algo propio y singular de nuestra especie, no es solo el deseo de placer o la supervivencia… los grupos humanos saludables, la pareja y la amistad, surgen de relaciones de confianza y respeto, lazos donde la comunicación, la transparencia y la complicidad permiten a las personas llegar lejos, y no solo en los temas de amor… la fidelidad no es solo un sistema efectivo de supervivencia para mantener una familia unida, tampoco un valor de otro tiempo ni la resaca de una primavera pasada… la fidelidad es la consecuencia de un amor profundo y libre que busca darse y entregarse a la otra persona sin cálculo… la infidelidad, por mucho que sea pactada y mutua, contradice el verdadero significado del amor y crea un profundo dolor… porque el amor, con mayúsculas, implica la relación generosa e íntima entre las personas capaz de soportar de las vicisitudes y el paso del tiempo para crear algo nuevo y bueno para todos… la #rosasinporqué vive en fidelidad enamorada, la gratuidad le permite amar sin cálculo ni fecha de vencimiento… ¿cómo vives la fidelidad en el amor?, ¿comprendes lo que es el amor hasta el extremo?… (con el Evangelio de hoy, San Mateo 5,27-32)