… enormes enredaderas cubiertas de hojas y flores, pobladas de pájaros y de mil criaturas, que buscan el follaje para brillar con el nuevo sol… ¿quién sabe lo que ocultan o lo que quieren ocultar?… brillo de un verde fuerte que devuelve a tu mirada el préstamo de una belleza inconcebible… colores nuevos y viejos que se abrazan en el gozo del sol de un nuevo día… porque ya amanece en el silencio de la noche que duerme y despierta sin que nadie acabe por admirarse… también hay luces y hay sombras en las relaciones con las personas, que no acabas de ver ni de vestir con tu imaginación… las flores sonríen y cierto «andar» supera los caminos, lo inefable es que la gratuidad ya está aquí… terrible es perder el tiempo con cosas superfluas y puras distracciones materiales… no seas coleccionista de amigos con un vacío “me gusta”, no presumas de amistad si no compartes vida y corazón, no llames amigo a cualquiera… no “tengas” amigos, “sé” más bien amigo… la amistad es la gratuidad en acción… la #rosasinporqué disfruta de la amistad, la gratuidad la capacita para compartir y festejar la vida del otro… ¿eres amigo o tienes amigos?, ¿cuidas la amistad?… (con el Evangelio de hoy, San Mateo 12,14-21)…