En tiempos de rebajas y descuentos, de la posibilidad de conseguir mucho por poco

…en tiempos de rebajas y descuentos, de la posibilidad de conseguir mucho por poco, bueno por nada, cuando parece que hay que comprar porque es más barato… o en tiempos de devaluación, donde se consigue poco por mucho… es bueno saber que la gratuidad no admite nada de eso… lo que verdaderamente importa no se puede convertir en mercancía… el amor de verdad ni se vende ni se compra, la amistad se encuentra y se disfruta, pero no se posee… el camino de la fe no se recorre cargando la SUBE, el sentido de la vida no se obtiene en el shopping… la trampa de la lógica del tener es intentar convertirte en aquello que adquieres… las cosas importantes se viven y dejan huella aunque se alejen, no entran en la lógica del consumo, del usar y tirar… lo esencial no es de temporada y, a veces, ni siquiera se ve… no puedes “consumir” la gratuidad como un producto de estación… da las gracias por las cosas elementales: el rayo del sol que no pregunta, la sombra del árbol con sus brazos extendidos, la tarde que murió ayer detrás de la montaña sin oficio de difuntos, el agua que trabaja su pureza en lo hondo de la sierra, el aire que limpia tus pulmones mientras duermes, la tierra viva generando en las raíces los frutos y colores… la mirada transparente como una puerta de cristal, la mano que disuelve el hastío al estrecharse, el cántico común que abre la existencia al nosotros infinito, el abrazo que te abriga y te cobija y tanto necesitas… la #rosasinporqué sabe que todo es gracia pero que nada es gratis, por eso vive la gratuidad dándose gratuitamente… ¿pones precio a lo esencial y mezquinas tu entrega?, ¿lo que posees te posee?… (con el Evangelio de hoy, San Mateo 10,7-15)…