Aunque no sientas nada, el Señor está “aquí”

… aunque no sientas nada, el Señor está “aquí”… porque está en tu corazón especialmente, y en todas partes… no puedes apartarte ni escapar ni esconderte porque te sabes “desnudo”… Él vendrá siempre a llamarte y a preguntarte: “¿dónde estás?”… y te llamará una y otra vez… y tú dirás: “Señor, no, aún no he rezado lo que es de mi obligación, me falta ayunar, hace varios días que no ayudo a nadie”… y Él insistirá: “¿dónde estás?”… y tú, de nuevo, tendrás miedo porque no sabes desde dónde oyes que te llama… porque todo es silencio… sí, silencio pleno que se explica a sí mismo… ¿dónde estás?, ¿dónde has ido a esconderte?… hay mil cosas que te ocultan, estás detrás de reparos, de proyectos, de instituciones, de modos… eso, eso, sobre todo de modos y de maneras… y te empeñas en multiplicar las ilusiones de métodos inalcanzables para refugiarte mejor, para rechazar mejor, una Presencia tan simple e inmediata… la #rosasinporqué disfruta de la presencia amada, presencia que la gratuidad le regala… ¿multiplicas acciones pensando que así encontrarás al Señor?, ¿piensas que el ayuno es como una dieta y no como una liberación de tus dependencias esclavizantes?… (con el Evangelio de hoy, San Mateo 9,14-15)…