“Amar es abrir la puerta” y hacer pasar al interior del corazón

… “amar es abrir la puerta” y hacer pasar al interior del corazón… y “dejarse amar es dejarla abierta”, porque el amor no retiene ni acapara ni esclaviza… si tienes miedo al amor, nunca arriesgarás, nunca abrirás… si tienes miedo a que te hagan daño, no amarás ni te dejarás amar… el amor confía, el amor conoce y se deja conocer… las puertas de los espacios públicos se abren para afuera, por seguridad, para dejar salir… las puertas de las casas se abren para adentro, para dejar entrar… y al abrir una puerta para adentro no te puedes quedar parado delante de ella, tienes que retroceder, dar un paso atrás… si das un paso al costado, no quedas delante de quien entra… amar es dar un paso atrás, para recibir de frente a aquel que llega hasta ti… conocer a alguien no es sólo conocer su nombre, sino todo lo que ese nombre encierra… y eso lleva tiempo, y se necesita paciencia, saber esperar… el ruido, la actividad y la dispersión, impiden conocer bien… no hay amor sin silencio, sin intimidad, sin atención al amado, a la amada… la #rosasinporqué no teme abrir la puerta de su corazón, así se permite conocer y dejarse conocer gratuitamente… ¿abres la puerta de tu corazón?, ¿das tiempo para el silencio y la intimidad así conoces más y mejor a los tuyos?… (con el Evangelio de hoy, San Juan 10,1-10)…