Amar a Dios sobre todas las cosas

… amar a Dios sobre todas las cosas no significa amar solo a Dios o amarlo más… significa amarlo en todas las cosas, o que allá donde amas de verdad puedas aprender a descubrir el reflejo del Dios que es amor desde la gratuidad… el amor inmediato es solo un camino hacia el Dios que es principio y fundamento… entonces el amor es fecundo… amar a los hijos es amar a Dios, que es Padre, y Madre, y te enseña en ellos la gratuidad… amar a los amigos es amar a Dios, que es relación y te llama a no vivir encerrado en burbujas de egoísmo… amar la propia vocación es amar a Dios, Creador que te ha dado tantas posibilidades de contribuir, con tus talentos, a continuar su obra… amar incondicionalmente es amar a Dios, que te enseña el valor de la alianza, de la fidelidad y del compromiso… ¿existen amores estériles?… puede haberlos… el amor al propio ego cuando está desquiciado y desmesurado, o a bienes que, entendidos como valores absolutos, solo se convierten en prisión… en la vida se trata de “amar mucho” o, mejor, de sólo dejarse amar y amar en todo, todo lo demás está demás… la #rosasinporqué busca la perfección en el amar, y la encuentra en la gratuidad… ¿pones medida al amor?, ¿postergas dejarte amar y amar por estar ocupado en otras cosas?… (con el Evangelio de hoy, San Mateo 5, 43-48)…